El amanecer en Patulul, un rincón fértil de Suchitepéquez, marcó el inicio de la cuarta etapa de la Vuelta a Guatemala 2024. La caravana de ciclistas arrancó desde este pintoresco municipio, donde la luz dorada del sol irradiaba el paisaje, impulsándolos a adentrarse en un trayecto lleno de historia y naturaleza viva. Cada pedalada llevaba consigo la tradición de los antiguos caminos mayas que serpentean por la región, dando al recorrido un toque de misticismo.

Cormac McGeough, de nacionalidad irlandesa se alzó con la victoria en esta etapa para el equipo Canel’s Pro Cycling de México, con un tiempo de 2:47.07. La jornada no solo destacó por la calidad competitiva de los participantes, sino también por los diversos paisajes guatemaltecos que se desplegaron a lo largo de cada kilómetro. En la clasificación general, el colombiano David González, del Teal Medellín EPM, mantiene el suéter de líder por una etapa más.

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Cormac McGeough ganador de la cuarta etapa de la Vuelta a Guatemala 2024

El recorrido llevó a los ciclistas desde Patulul hasta San Antonio Suchitepéquez, donde los cafetales y las ceibas centenarias parecían susurrar relatos de generaciones pasadas, envolviendo al pelotón en un manto de historia y tradición. Cada kilómetro recorrido mostraba la riqueza cultural y natural de Guatemala, uniendo a los espectadores locales que se reunieron a lo largo de las carreteras para animar a los competidores.

Chicacao fue el siguiente punto destacado en la ruta, un poblado vibrante que refleja la vida del suroccidente guatemalteco, donde el bullicio de la gente y la intensidad del clima tropical se hacen sentir. Bajo el sol radiante, el pelotón avanzaba hacia San Miguel Panám, cruzando tierras donde la naturaleza y la cultura guatemalteca conviven en armonía. La calidez de la región y la humedad daban al entorno una atmósfera densa y palpable, mientras las pequeñas comunidades se sucedían como cuentas de un collar que une destinos y personas en el mismo recorrido.

Continuando hacia San Bernardino, los ciclistas siguieron el curso del río Mazá, un fiel testigo del paso de la historia y de las generaciones de campesinos que trabajan sus orillas. En Mazatenango, una ciudad emblemática de la región, el pelotón fue recibido por la vitalidad de sus habitantes y su historia forjada por décadas de esfuerzos y anécdotas. El lugar, con su carácter único, dotó a los corredores de un ímpetu adicional, recordándoles la rica herencia de Guatemala.

La carrera avanzaba y en Cuyotenango, el aroma de la caña recién cortada invadía el aire, mezclándose con la energía de los competidores que pedaleaban con tenacidad hacia el siguiente tramo. La etapa se adentró en Retalhuleu, una región conocida por su conexión a las antiguas leyendas y por ser cuna de un pasado donde la naturaleza y la vida humana coexistían en total armonía. Allí, los corredores experimentaron el vigor de un lugar que es símbolo de fuerza y resistencia.

En el tramo final, el ambiente se tornó en un susurro de vida en La Hulera, donde los ciclistas, como aves en pleno vuelo, avanzaron con rapidez hacia su destino final. Con Coatepeque en el horizonte, el pelotón veía cerca la línea de meta en la “tierra del quetzal”, un lugar donde la esencia de Guatemala se reflejaba en cada esquina y cada tramo recorrido.

Foto: Alex Meoño.

Premios intermedios

Metas volantes

Metas Volantes Posiciones
Gasolinera Don Arturo, 16.8 km
  1. Sebastián Brenes (CRC)
  2. Heriberto Quiroz (MEX)
  3. Uriel Espinoza (MEX)
Parque San Antonio, 37.8 km
  1. Johan Colón (COL)
  2. Dorian Monterroso (GUA)
  3. Brayan Ríos (GUA)
Entrada a Las Palmas, Retalhuleu, 77.7 km
  1. Dorian Monterroso (GUA)
  2. Cormac McGeough (IRL)
  3. Mateo Sánchez (COL)

Premios de montaña

Premios de Montaña Posiciones
Entrada a Mazatenango, 4ta. Categoría, 51.8 km
  1. Jhonatan Chaves (COL)
La Hulera, mojón 104, 2da. Categoría, 101.8 km
  1. -Pendiente-