De tanto mirar el mundo a través de un lente, Jayro Bustamante ha logrado entenderlo.

Será este domingo 28 de febrero cuando los guatemaltecos estén al pendientes de la 71 edición de los Golden Globe, evento en el que competirá por primera vez un filme guatemalteco.

Lleno de muchas emociones y ansiedad, el cineasta guatemalteco nos cuenta un poco más sobre el camino que ha conllevado “La llorona”, el cual ha abarcado desde triunfos, censuras, premios y mucho aprendizaje.
La entrevista con Jayro Bustamante…

¿Qué pasaba por tu mente una noche antes de la nominación?

Fue una noche de mucha ansiedad y angustia porque sabíamos cual era la calidad de películas que estaban en competencia, las cuales esperamos pronto traer a Guatemala. Estábamos cruzando los dedos. Luego nos reunimos con el equipo y nos quedamos a la espera del gran anuncio.

¿Qué tan catártico fue para ti hacer “La llorona”?

Mucho, definitivamente “La llorona” es una película catártica. Lo que se pretendía era tener ese espacio dentro de la ficción, para imaginar un mundo diferente. Este filme es de esas películas que buscan decir: “¿Qué hubiera pasado si…?” o poder presentar realidades alternativas. Profesionalmente fue muy importante. El cine me gusta como lenguaje, jugar con los diferentes géneros para contar distintas historias. Esta cinta fue la oportunidad de pasar del drama realista a un universo mucho más fantasioso con realismo mágico, además de incluir elementos de horror y suspenso. El realismo mágico es una de las expresiones que más me gusta porque creo que en Latinoamérica vivimos así.

¿Qué lección te dejo este filme?

Me dejó muchísimas. Pero más que una lección me ha dejado muchos maestros. Detrás de la película hay más de 2 mil personas, y uno aprende de ellos porque son quienes están poniendo toda su creatividad y esto es muy importante. El hecho de que estemos nominados es una primicia para Guatemala y Centroamérica. Lo importante es decir que detrás de todo esto hay dos mil personas capaces de hacer cosas mejores y sobretodo porque son guatemaltecos.
«La llorona» marca historia…

¿Que se siente haber presidido un hito en Guatemala?

Es un momento lleno de muchas emociones, de alegría y satisfacciones de haber hecho un buen trabajo. Pero el trabajo continúa, ahora nos toca acompañar al filme por 5 a 7 años de vida activa que tiene una película. Luego ya se quedará, pero sigue siendo como un hijo. Todo esto nos permite tener un sentimiento de esperanza, que a partir de ahora la puerta está abierta, otras películas y cineastas vendrán. Esperemos que más nombres guatemaltecos estén en los Golden Globe.

¿Cómo ha sido tu manera de luchar contra la censura?

Creo que la censura más grande que tenemos muchos artistas es la censura del público mismo. Nosotros no estamos acostumbrado a tener un reflejo como el espejo del cine. No estamos acostumbrados a vernos y ser retratados. Esto no es un documental, no se pretende contar la historia. Ahora nos toca bajar la guardia y vernos reflejados en nuestros materiales, es un paso doloroso. Mucha gente me llamó para decirme que estaba haciendo mal las cosas y que debería hacer películas de una Guatemala sonriente.

https://www.publinews.gt/gt/espectaculos/2021/02/09/la-llorona-aspira-nominacion-oscar.html

Siempre has dicho que no trabajas por los premios, pero la temporada de reconocimientos es a nivel mundial, y ya hay quienes te ven con un Óscar por “La llorona”…

Es muy loco, nosotros estamos muy satisfechos con el recorrido que ha tenido “La llorona”. Llegar a una nominación de los Goya y de los Golden Globe es muy satisfactorio. Nosotros nos sentimos más que agradecidos con la cantidad de premios que ya ha ganado la cinta. Creo que los Golden Globe son la antesala de los Óscar, pero en los Golden no poder ni siquiera mandar tu película, ellos son los que escogen los filmes y el hecho de haber sido “pescados” en ese océano cinematográfico es todo un orgullo.
Un orgullo guatemalteco…

¿Cuáles son esos temas que te siguen inquietando y quieres expresarlos como artista?

Yo he vivido la mitad de mi vida fuera de Guatemala. Cuando empecé, desde Francia, con las ayudas e impulsos, los artistas logran terminar sus proyectos, porque el estado asume darnos un salario. Luego de eso me plantee hacer cine en Francia o regresar a Guatemala. Sin embargo pensé que el cine en mi país podía ser más relevante. Me propuse crear material con contenidos que participen en la lucha de los derechos humanos, que sean una herramienta para causar un impacto positivo.

¿Como lidias con el estrés?

Voy a tener que comenzar a pedir recetas (risas). Esto es muy complejo, porque el estrés no es simplemente de una reacción a eventos negativos, también se da a cosas positivas. Tengo un equipo muy bueno, no tenemos conflicto a la hora de delegar porque cada quien sabe lo que tiene que hacer. Sin ellos estaría con el ojo temblando.