El pasado 16 de septiembre se dio a conocer la trágica muerte de Liam Payne, quien había caído desde el balcón de su habitación en un hotel de Buenos Aires, Argentina.

Todo apuntaba a un posible suicidio o caída involuntaria; sin embargo, la familia del cantante y los fans piden a la policía que se abra una investigación más profunda.

Ellos quieren descubrir si existe la posibilidad de que su muerte se haya debido a otras causas desconocidas.

 

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Medios revelaron que los familiares piensan que, si los empleados del hotel hubieran llamado a una ambulancia cuando éste se desplomó en el suelo del vestíbulo y no haber esperado hasta que se encontrara solo en su habitación, aún seguiría vivo.

“Liam no tenía que morir y no quería morir. Él estaba mirando hacia el futuro.

Si alguien hubiera llamado a una ambulancia cuando se derrumbó en el vestíbulo del hotel en lugar de llevarlo de vuelta a su habitación y dejarlo allí solo, en un estado psicótico, todavía estaría con nosotros”, afirmaba la fuente a Clooser Weekly.

Horas antes de su muerte fue captado en los sillones del vestíbulo viendo su portátil, luego camino a los ascensores, y ambas imágenes aparece calmado, lejos de la imagen “errática y agresiva” que señalaron los empleados del hotel.

¿Crimen contra el cantante?

Todas las pistas han hecho que la familia este pidiendo a la policía una investigación más profunda, pues creen que él pudo haber sido arrojado por el balcón.

Según señalaron, sospechan que Liam Payne podría haber tenido una discusión con alguien en la habitación, lo que habría llevado a que lo golpearan, dejándolo inconsciente.

Tal y como se ha dejado ver los resultados preliminares de la autopsia, él ya estaba inconsciente antes de caer al suelo.

https://emisorasunidas.com/2024/10/17/revelan-resultados-preliminares-autopsia-liam-payne-octubre-2024/

Creen que quien lo dejó inconsciente, posteriormente lo habría arrojado por el balcón, dando a entender a la policía de que él se habría suicidado.

Se estima que, cuando una persona se precipita por una altitud pronunciada, el individuo suele coger impulso.

Algo que por supuesto no ocurrió con él, puesto que cayó a una distancia considerablemente cercana al borde. Tampoco puso los brazos a la hora de caer, algo que se suele hacer por inercia.