El presidente Alejandro Giammattei publicó un tuit para presentar sus condolencias por el deceso del Príncipe Felipe, duque de Edimburgo.

«Presento mis condolencias a su majestad la Reina Isabel II y a toda la familia real británica ante el fallecimiento del Príncipe Felipe, Duque de Edimburgo. Nuestra solidaridad con el pueblo británico en estos momentos difíciles», escribió el mandatario guatemalteco.

Decenas de líderes mundiales y políticos en el mundo reaccionaron ante la muerte del Duque de Edimburgo.

Honras al Príncipe Felipe

Esposo de la reina Isabel II durante más de siete décadas, el príncipe Felipe, recientemente dado de alta del hospital, murió este viernes a dos meses de cumplir los 100 años.

«Su alteza real ha fallecido en paz esta mañana en el castillo de Windsor», anunció el Palacio de Buckingham.

El primer ministro Boris Johnson elogió «la vida y el trabajo extraordinarios» del duque de Edimburgo, encabezando el homenaje de toda una nación donde desde los independentistas escoceses, en plena campaña electoral, hasta los unionistas norirlandeses, sacudidos por una inusual ola de violencia, enviaron mensajes de pésame a la reina.

Los partidos políticos anunciaron la suspensión de sus campañas para los comicios regionales y municipales del 6 de mayo y el gobierno confirmó la cancelación de los eventos oficiales.

Los mensajes de pésame llegaron rápidamente de todo el mundo.

No habrá funeral de Estado

El palacio de Buckingham anunció el viernes que su esposa, la reina Isabel II, está «considerando» cómo llevar a cabo su funeral y los posibles actos oficiales de conmemoración.  «Los detalles se confirmarán a su debido tiempo», precisó.

Sin embargo, el College of Arms, una organización estrechamente relacionada con la aplicación de los protocolos reales, dijo en su página web que el príncipe Felipe no tendrá un funeral de Estado y que su féretro no será expuesto al público.

Sus restos mortales reposarán en el castillo de Windsor, al oeste de Londres, antes de un funeral en la capilla de San Jorge «según la costumbre y los deseos de su alteza real», precisó.