Mientras Luis Miguel se encuentra triunfando con su actual gira donde recorrerá varias ciudades del continente americano, su vida privada está en el ojo del huracán.

Además, el cantante vive su tórrido romance con la diseñadora española Paloma Cuevas, la madre de sus hijos reclama su presencia en el país azteca.

Como nunca lo había hecho, Aracely Arámbula habló fuerte y directo respecto a la ausencia de El Sol en la vida de sus hijos Miguel y Daniel, a quienes presuntamente el famoso no ve desde hace años.

“Mi puerta siempre ha estado abierta, no tengo que estar yo. Él tiene que tener más acercamiento con ellos, yo soy la mamá. Como todos los padres, no por ser ídolo quiere decir que no puedes ser papá.

Vean a Alejandro Fernández, con sus hijos en el escenario, con su nieta; Chayanne, gente que me ha atendido a mí con mucho cariño, con mucho corazón, que han atendido a mis hijos, que mis hijos les tienen cariño a ellos y admiración. Y cómo es posible que tienen el papá que es un ídolo, qué bueno, qué padre.

A mis hijos siempre les he dicho ‘admiren muchísimo a su papá porque su papá es un gran artista’, pero ojalá que ese gran artista también sea un gran padre para ellos. No conmigo, para ellos”, dijo a su paso por la alfombra roja de la obra teatral Vaselina.

No quiere ver al cantante

Aracely explicó que en estos momentos a ella no le interesa ver a Luis Miguel, pues de acuerdo a sus declaraciones, éste se ha portado mal por no lo que le “cae muy mal”.

“Para empezar no me interesa verle la cara porque me cae muy mal, ahorita me cae muy mal. No se ha portado nada bien. Si él tuviera interés, decían ‘tiene que estar ella presente’, pues era cuando tenían 4 y 6, ahorita tienen 16 y 14, ya están más altos que él”.

Asimismo hizo referencia al apodo con el que se conoce el artista y aseguró que espera que así como enorme es el sol ojalá así de grande sea el corazón de Luis Miguel para que pueda ver a sus hijos.

“La verdad es que así como sale ese sol enorme, tan grande, -no quiero decir nada malo, pero voy a decir las cosas que siento- tan grande como su ego, ojalá que así de grande sea el corazón para sus hijos”.