En una noche memorable para el Real Madrid, Vinícius Júnior se erigió como la figura indiscutible al anotar un espectacular hat-trick en la final de la Supercopa de España contra el eterno rival, el FC Barcelona. Con un marcador contundente de 4-1, el equipo blanco se coronó campeón, sumando así su decimotercer título en este prestigioso torneo.

Vinícius, con tan solo 39 minutos en el reloj, dejó su sello con tres goles que deslumbraron a propios y extraños. Su actuación no solo le valió el reconocimiento del público y de sus compañeros, sino que también lo catapultó como el Jugador Más Valioso (MVP) del encuentro. No contento con ello, el joven brasileño desencadenó la expulsión de Ronald Araujo en los minutos finales, sellando una noche memorable.

Vinicius Júnior y su deseo de mejorar

En la rueda de prensa posterior al partido, Vinícius demostró humildad al reconocer la necesidad de mejorar aspectos de su juego y su personalidad. «Quiero ser una persona mejor. A veces quiero hacer todo por el equipo y acabo enfadando a los demás, a mí y a mis compañeros. Quiero mejorar», expresó el talentoso futbolista, revelando su constante búsqueda de la excelencia tanto dentro como fuera del terreno de juego.

La celebración de Vinícius tras su hazaña no pasó desapercibida. El joven delantero confesó que su gesto estaba dedicado a su ídolo, Cristiano Ronaldo. «La celebración es por Cris. Es mi ídolo y ahora está jugando aquí (Arabia Saudita)», afirmó, dejando claro el profundo respeto y admiración que siente hacia el astro portugués.