En Zacapa reinó la polémica en el tema arbitral y las conductas inapropiadas por los camilleros del equipo local; por su parte, en Coatepeque se vivió una gran fiesta con una goleada histórica de 5-0 de Coatepeque ante Deportivo Suchitepéquez (global de 7-0). Con este resultado, los coatepecanos vieron cómo se había logrado dos objetivos deportivos, llegar a la final de la Liga Primera División de No Aficionados y ascender a la Liga Nacional.
Entre la fiesta, algarabía, música, lágrimas, agradecimientos entre aficionados y futbolistas, los jugadores Denilson Ochaeta y Alexander Morales brindaron un momento especial. Realizaron una penitencia de recorrer arrodillados de extremo a extremo la gramilla del estadio Israel Barrios.
Recorrido
Denilson Ochaeta, jugador del Deportivo Coatepeque que jugó los 90 minutos en el estadio Israel Barrios, no más al terminar el partido y darse el abrazo de felicitación con sus compañeros se fue a una de las porterías del escenario deportivo, se arrodilló, abrió una biblia la cual le hicieron el favor de llevársela, y empezó a leer fragmentos de la santa escritura.
Recorridos algunos metros, el futbolista Alexander Morales, quien había ingresado al partido a los 82 minutos, se dirigió hacia Denilson Ochaeta y se sumó a la penitencia como agradecimiento a Dios por lo que se había conseguido dentro del terreno de juego. También el grupo de plantel hizo la denominada ruedita y elevaron una oración con rodilla en tierra.
Esta no es la primera vez que Denilson Ochaeta y Alexander Morales realizan esa manifestación de agradecimiento al ser Supremo. La última vez fue en la final ante Zacapa del Apertura 2022 cuando los coatepecanos lograron el título.
Coatepeque venció a Suchitepéquez 5-0, para un global de 7-0, y así logró su acceso a la final ante Deportivo Zacapa, y su ascenso o regreso a la Liga Nacional. Los goles del domingo fueron marcados por Santiago Gómez, José Alvarado, Charles Martínez en dos oportunidades y Oliver Díaz.