En un mundo donde la diversidad y la inclusión son cada vez más valoradas, el fútbol, uno de los deportes más populares a nivel mundial, ha comenzado a abrir espacios seguros para la participación de todos aquellos que desean practicarlo de manera profesional, sin temor a ser discriminados por sus preferencias sexuales. Este año 2024 marcará un hito en la historia del fútbol español con la participación de Rinos Fútbol Club, el primer club LGBTI en competir oficialmente en la Tercera División Andaluza.

El Rinos FC fue fundado en 2020, en pleno auge de la pandemia de COVID-19, por un pequeño grupo de cinco hombres liderados por José María River, un exjugador del Motril Club de Fútbol. La creación de este club fue motivada por la necesidad de ofrecer un espacio inclusivo y seguro para los jugadores de la comunidad LGBTI, luego de que River experimentara personalmente la discriminación dentro de su antiguo equipo tras revelar su bisexualidad. «Empecé a notar cómo me hacían el vacío y a escuchar los comentarios, las miradas acusatorias», relata José, refiriéndose a la hostilidad que enfrentó.

La misión de Rinos FC

Desde sus humildes comienzos, el Rinos FC ha crecido significativamente. Lo que comenzó como un pequeño grupo de cinco jugadores, hoy se ha transformado en una entidad robusta con 20 miembros activos.

Gracias a un acuerdo de afiliación con el Arenas de Armilla, Rinos FC ha logrado un avance significativo al convertirse en una asociación deportiva federada. Este logro les ha permitido obtener un lugar en la Tercera División de Andalucía, marcando un precedente histórico para los clubes LGBTI en España. «Nos estamos llevando respuestas muy positivas de todos los sectores. Desde las instituciones, la Federación Granadina, la Federación de árbitros. Todos nos apoyan», expresó José María River, destacando la recepción favorable y el apoyo de las organizaciones deportivas.

El objetivo principal de Rinos FC y de su fundador, José María River, es claro: ningún jugador debe sentir la necesidad de abandonar su pasión por el fútbol debido a la discriminación basada en su orientación sexual. El club trabaja arduamente para crear un entorno donde todos los jugadores, independientemente de su identidad sexual, se sientan valorados y respetados. Este enfoque no solo beneficia a los jugadores del club, sino que también envía un mensaje poderoso a la comunidad futbolística en general sobre la importancia de la inclusión y el respeto.