Francia, una de las selecciones favoritas en la Eurocopa 2024, enfrenta una crisis de efectividad en su línea ofensiva. A pesar de contar con una plantilla llena de talento y reconocidos goleadores, los resultados en la fase de grupos han dejado mucho que desear. Con solo dos goles en tres partidos, Francia ha marcado menos que cualquier otro equipo clasificado para las fases eliminatorias, salvo Serbia, que fue eliminada con un solo punto en el Grupo C.

La estadística es clara y preocupante: de 49 remates realizados por la selección francesa, solo uno ha terminado en gol. De estos 49 tiros, 14 fueron a puerta, 17 se fueron desviados y 18 fueron bloqueados por los defensores rivales. A pesar de ser el segundo equipo con más disparos en esta fase, superado únicamente por Alemania con 57, la falta de precisión en el ataque es evidente. El único gol anotado fue un penalti convertido por Kylian Mbappé, quien además lidera la tabla de remates a puerta de la Eurocopa con seis tiros acertados.

¿Qué le falta a Francia?

Kylian Mbappé, el delantero estrella del Real Madrid, ha tenido una actuación mixta. Ausente en el empate sin goles contra Países Bajos debido a una fractura de nariz, reapareció en el empate 1-1 contra Polonia. Con un total de diez tiros, Mbappé ha marcado solo una vez, evidenciando una eficiencia que no corresponde a su reputación de goleador. A pesar de ser el jugador con más remates entre los tres palos del torneo, su falta de gol sigue siendo una preocupación significativa.

La falta de gol no es solo un problema de Mbappé. Antoine Griezmann, otro de los pilares ofensivos de Francia, ha rematado nueve veces sin éxito. Griezmann, con solo dos goles en sus últimos 31 partidos internacionales, fue suplente en el último partido contra Polonia por decisión técnica, algo inusual en su carrera reciente. Otros jugadores como Marcus Thuram, Ousmane Dembélé y Aurelien Tchouameni también han tenido múltiples oportunidades sin concretar.

Colectivamente, Francia es el segundo equipo que más ataca en la Eurocopa 2024 con 164 ataques, solo superado por Alemania con 207. Sin embargo, esta alta cifra de ataques no se ha traducido en goles. Además, Francia es el equipo que más regatea, con 67 intentos de dribbling, liderados por Dembélé con 22, y el tercero en saques de esquina, con 19, detrás de Alemania y Dinamarca.

Didier Deschamps, el seleccionador francés, ha reconocido la falta de eficacia de su equipo pero mantiene una actitud positiva. «Queríamos el primer puesto, pero hicimos lo que teníamos que hacer. Dimos todo hasta el final. El equipo está unido y creando oportunidades. Estamos donde queremos estar, aunque tenemos mucho margen de mejora», declaró tras el empate con Polonia.

Francia ha avanzado a las fases eliminatorias, pero se enfrenta a un camino complicado. Enfrentará a Portugal en cuartos de final si ambos superan sus respectivos partidos de octavos. En caso de avanzar a semifinales, podrían encontrarse con Alemania o España, dos de los equipos más fuertes del torneo. Esta situación exige una mejora inmediata en la eficacia ofensiva si Francia quiere aspirar al título.

Concentrados en la ciudad alemana de Paderborn, los jugadores y el cuerpo técnico francés tienen la tarea de encontrar soluciones a sus problemas ofensivos antes de su próximo partido en Dusseldorf. La historia reciente advierte: en las Eurocopas de 2008 y 1992, cuando Francia anotó solo dos goles en la fase de grupos, no logró avanzar más allá de esa ronda.