En un emocionante enfrentamiento, la selección olímpica de Argentina logró una victoria crucial al vencer a Irak por 3-1 en los Juegos Olímpicos de París 2024. Este triunfo, que se suma al esfuerzo por redimirse tras una derrota inicial, posiciona a Argentina con un pie en los cuartos de final, dependiendo únicamente de sí misma para avanzar en el torneo.

El equipo dirigido por Javier Mascherano demostró determinación desde el inicio, consciente de la necesidad de un resultado positivo para mantenerse en la contienda por una medalla. A pesar de algunos problemas iniciales de precisión en el ataque, Argentina dominó el juego, marcando la pauta con una estrategia ofensiva que mantuvo a Irak bajo constante presión.

Argentina se repuso de la derrota en la primera jornada

El primer gol llegó temprano en el partido, cuando Thiago Almada, jugando en su estadio habitual en Lyon, recibió un pase preciso de Julián Álvarez para abrir el marcador en el minuto 13. Almada, con su característico estilo elegante y preciso, no desperdició la oportunidad, colocando el balón fuera del alcance del portero iraquí.

A pesar del control argentino, Irak no se mostró pasivo y aprovechó una oportunidad crucial antes del descanso. En el minuto 45, Aymen Hussein capitalizó un centro de Ahmed Hasan para igualar el marcador, sorprendiendo a la defensa argentina y dejando el partido abierto para la segunda mitad.

La segunda mitad comenzó con Argentina en busca del gol que les devolviera la ventaja. Mascherano realizó un triple cambio estratégico al minuto 60, introduciendo a Kevin Zenón, Luciano Gondou y Gonzalo Luján, movimientos que inyectaron energía y dinamismo al equipo.

La táctica dio resultados casi inmediatos. En el minuto 66, Luciano Gondou, con un impresionante remate de cabeza tras un centro de Zenón, puso a Argentina de nuevo en ventaja. Este gol subrayó la importancia de los cambios y la profundidad del banco argentino, que supo responder en momentos clave del encuentro.

Con la ventaja restablecida, Argentina continuó presionando. Aunque Gondou y Giuliano Simeone estuvieron cerca de ampliar la ventaja, fue finalmente Equi Fernández quien aseguró la victoria en el minuto 85. El gol, producto de una jugada colectiva bien orquestada, no solo selló el triunfo sino que también destacó la cohesión y el trabajo en equipo de la selección argentina.

Con esta victoria, Argentina se encuentra en una posición favorable para avanzar a la siguiente fase del torneo. El próximo desafío será enfrentar a Ucrania, un partido en el que la Albiceleste buscará asegurar su clasificación a los cuartos de final.