La Policía Nacional Civil (PNC) avanza en la investigación del ataque armado cometido contra un estudiante en el municipio de Colomba Costa Cuca, Quetzaltenango, del cual el presunto agresor es un adolescente de 14 años que ya se encuentra bajo custodia de las autoridades.

El director general de la entidad de seguridad, David Custodio Boteo, brindó detalles al respecto del caso durante una entrevista en el programa A Primera Hora, de Emisoras Unidas, en la cual se refirió a los posibles motivos que estarían detrás del crimen.

Señaló que este hecho ha causado mucho revuelo e indignación en la sociedad guatemalteca pues, según sus palabras, se trata de prácticamente un niño que atentó contra la vida de un adolescente con el cual, de acuerdo con información preliminar que se obtuvo, había tenido algún tipo de problemas. Añadió que se conoció que el presunto agresor también había sido estudiante del centro educativo al que pertenece la víctima.

De acuerdo con el jefe policial, no es la primera vez que ocurren hechos lamentables en Colomba Costa Cuca, sino que también hubo ciertos incidentes en el 2016 y 2021. En ese contexto, detalló que en el área hay presencia de grupos de pandillas que también están vinculados a los que operan en el área de Villa Nueva, Guatemala, que pertenecen al Barrio 18, específicamente a los Crazy Gangster.

“Este municipio es complicado porque también opera la Mara Salvatrucha y siempre ha habido una serie de incidentes en los cuales se ha involucrado a mujeres y niños en tema de extorsión”, expresó.

Y con respecto a este hecho preciso aseguró que no se descarta que sea un tema de pandillas o de iniciación dentro de las pandillas, porque se ha determinado que por la edad que tiene el adolescente que fue remitido y conducido al juzgado respectivo, posiblemente tenga el cargo de “chequeo” dentro de la referida clica.

Ataques forman parte de violentos ritos de iniciación de pandillas

Custodio Boteo amplió detalles con respecto a estos ritos que implementan los grupos criminales. Según dijo, en la actualidad depende del jefe de la clica asignarle misiones específicas a quienes ejercen como “chequeos” para que de cierta manera demuestren su nivel de violencia.

“Puede ser asesinar al dependiente de una tienda, al piloto de un bus, a un policía, a un fiscal, a un juez, o lo que sea, para poder demostrar su nivel de violencia y poder ser aceptado dentro de la pandilla. Pueden ser 10, 15 o 20 homicidios los que tengan que cometer para poder ser aceptados como homies brincados de una pandilla”, reveló el director.

Asimismo, indicó que antes de 2005 la iniciación dentro de las pandillas era de 13 segundos a golpes dentro de la Mara Salvatrucha, tomando en cuenta que ese es el número alusivo de esta organización. Mientras que para el Barrio 18 los nuevos integrantes debían soportar 18 segundos recibiendo golpes.

Sin embargo, indicó que eso ha cambiado debido a la exigencia que empezaron a hacer las clicas para que los empresarios, transportistas y comerciantes empezaran a pagar la extorsión semanal o la denominada “renta”.

Agregó que, además de ser parte de las misiones para ser miembro activo, este tipo de actividades es lo que hace que le den una denominación, “taca” o “alias”, como se les llama a los apodos asignados a los integrantes de pandillas.

“Ellos se ganan esa taca cometiendo hechos delictivos. Se tienen que ganar el respeto cometiendo hechos sumamente violentos para poder ser ingresados y aceptados en la clica”, puntualizó.

* Escuche aquí la entrevista completa con el director de la PNC: