En el mundo del fútbol, los parones por selecciones son una realidad inevitable. Sin embargo, para Pep Guardiola, entrenador del Manchester City, estas interrupciones representan un dolor de cabeza, especialmente cuando sus jugadores regresan con lesiones. En una reciente rueda de prensa, Guardiola expresó su frustración por las lesiones que han afectado a su equipo, resaltando la necesidad de proteger la integridad física de sus futbolistas.

Entre las bajas más significativas se encuentran Rodri, quien no estará disponible hasta el final de la temporada, y el joven Bobb, que estará alejado de las canchas durante varios meses. Por otro lado, aunque se espera que Kevin De Bruyne y Nathan Aké regresen pronto, Guardiola no pudo proporcionar una fecha exacta para su retorno. Además, el entrenador confirmó que Kyle Walker también está lidiando con problemas físicos tras su convocatoria con la selección inglesa.

Guardiola molesto con las lesiones

A pesar de estas ausencias, el Manchester City sigue demostrando su fortaleza en el terreno de juego. Recientemente, lograron una victoria crucial ante el Wolverhampton, gracias a un cabezazo de John Stones en el último suspiro del partido. Este triunfo permite a los mancunianos mantenerse en la lucha por el título, reafirmando su posición como uno de los equipos más competitivos de la Premier League y de Europa.

Durante la rueda de prensa, Guardiola subrayó su aprecio por los compromisos internacionales y la importancia de que sus jugadores representen a sus selecciones. “Siempre animo a los jugadores a que vayan con su selección, siempre es un placer”, dijo. Sin embargo, fue contundente al expresar su descontento con las lesiones que surgen durante amistosos. “Lo siento mucho, pero no puedes volver lesionado. Aquí nos pagan bien, el club es quien nos paga y no la selección. Hay que respetar al club”, afirmó.

Guardiola recordó con frustración el caso de Stones, quien regresó lesionado tras una convocatoria el año pasado, lo que le costó al equipo en momentos cruciales de la temporada. “Nunca estuve tan enfadado como cuando Stones volvió lesionado la temporada pasada. Teníamos los cuartos de final de la Liga de Campeones contra el Real Madrid y opciones de ganar la Premier League, y dos jugadores volvieron lesionados después de jugar amistosos. ¡No me gustó nada!”, destacó el entrenador.

Con un calendario apretado y cuatro bajas importantes, Guardiola se enfrenta a un desafío considerable. Sin embargo, se mostró optimista sobre la capacidad de su equipo para adaptarse. “Preferiríamos tener a todos los jugadores disponibles, pero tenemos cuatro bajas importantes. A dos de ellas les queda poco tiempo para recuperarse, pero Bobb no estará listo hasta enero o febrero, y Rodri lo echaremos de menos hasta el final de temporada”, comentó.

A pesar de las dificultades, Guardiola se siente confiado en que su equipo podrá afrontar los desafíos que vienen por delante. El próximo partido será contra el Sparta de Praga en la Liga de Campeones, un encuentro que promete ser fundamental en la búsqueda del City por el éxito en múltiples competiciones.